Bordes
23 de agosto de 2025
Porque es difícil la intimidad
La intimidad con el otro y, sobre todo, con nosotros mismos. Y con el otro.
¿Cuántos pliegues tendremos que desandar para habitarnos más profundamente?
¿Cuántos cálculos habrá que dejar de hacer para mirarnos a los ojos, allá en lo hondo?
Como mi paciente que me cuenta que no sale con nadie porque nadie le alcanza y todos le parecen que hablan de estupideces y que siente que tampoco ella le alcanza a nadie porque ella misma habla de estupideces porque si habla de lo que realmente le interesa a nadie le va a interesar y porque además si finalmente hay alguien a quien le interese la relación va a prosperar y a avanzar y entonces una cosa llevará a la otra y finalmente se irán acercando y…
¿Tenés miedo? - Le digo ("Y yo también" pienso)
Ah, tengo miedo… - Me dice (Se dice)
Miedo a la cercanía
a la intimidad
a la intimidad con el otro
a que el otro toque mi herida
a que me duela
Y que me duela lo que ya me duele
lo que siempre me duele
"… la lejanía
de estar cerca sin tocarse
como bordes de la misma herida…"
Cuando la poesía habla más de nosotros que nosotros mismos